Vengo de una gran familia (grande por el tamaño, claro, somos siete hermanos), recuerdo a mi padre presidiendo la mesa, feliz de compartir con todos nosotros los ricos manjares de una comida de domingo, donde no podía faltar el aperitivo ni el queso final.
Me gustaría transmitir ese sentimiento compartiendo con vosotros los ritos alrededor de unos productos que me traen tan buenos recuerdos.